Así da gusto hablar de política, con estos nuevos hombres de la izquierda europea: Matteo Renzi, Alexis Tsipras .... y el equivalente español no es el memo este de Pedro Sánchez; su look de dependiente del Corte Inglés o de vendedor de Teletienda no me pone nada. En cambio de buena gana me iría de groupie a los mítines del actual líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón.
A ver, en las pelis porno los hay más guapos, vale, pero estamos hablando del mundo de la política, comparémoslo con la media en su gremio .... Tal vez si no saliera en la tele este hombre sería el típico al que echaría una mirada curiosa si me lo encuentro en el metro, bueno, o dos miradas curiosas, al menos una por delante y otra por detrás, y tampoco mucho más, pero por algo hablan de la erótica del poder.
Tiene poco que ver con los tíos de los que suelo hablar por aquí, que son más bien tipo mulos: este es jovencito, delgado, con voz aniñada .... No me debería gustar y sin embargo cómo me gustaría ver lo que hay debajo de esa camisa.
Vale, es verdad que la barba favorece. Sigue dejándotela, Alberto.
La chaqueta te sienta muy bien, pero ya te podías quitar algo de ropa de vez en cuando, hombre. Que algunos nos dejamos comprar el voto fácilmente ...
¿Intuyo un pecho afeitado? ¿Tal vez lampiño? No está bien dejar tantos misterios sin desvelar, amigo. ¿Qué hay de las leyes de transparencia(s)? Luego te quejarás de que Podemos te quite votantes.
Que seriote es, que poco sonríe. Me gusta más todavía.
